Un programa de Topdressing con arena puede mejorar la calidad de un green a largo plazo si ha sido bien planificado e implementado. El manejo del césped de las canchas de golf ha sufrido significativos cambios durante los últimos 20 años. Una práctica que ha recibido una buenas acogida ha sido la del topdressing con arena en los greens.
CLASIFICACIÓN DE ARENAS CON TAMAÑO DE PARTÍCULAS
OBJETIVOS DE UN PROGRAMA DE TOPDRESSING
Los principales objetivos del Topdressing incluyen:
* Emparejar la superficie del green.
* Una ayuda para controlar el thatch (acumulación de materia orgánica formada por raíces, hojas y estolones sin descomponer, ubicado entre la superficie del suelo y el pasto en crecimiento. Es el medio ideal para la proliferación de enfermedades).
* Modificar la capa superficial del suelo.
El topdressing también se utiliza en las resiembras para establecer céspedes y como medio de aplicación de nutrientes u otras mejoras del suelo.
Todo programa de topdressing debe ser cuidadosamente planificado e implementado. Recuérdese que cuando se aplica cualquier material de topdressing se está construyendo el suelo del green del futuro. Se debe ser muy cuidadoso al seleccionar y mezclar materiales para el topdressing de un green. Un buen topdressing ha de proporcionar un excelente suelo para mantener correctamente el green del futuro.
La mayoría de los errores en el topdressing ya sea en los materiales utilizados o en la aplicación del mismo no tendrán un efecto negativo a corto plato, sino que a través de varios años aparecerán las consecuencias.
Un cambio significativo en la textura del suelo o un desarrollo de capas en la zona de raíces podrán restringir el crecimiento de las misas.
El topdressing debe ser aplicado de tal forma que la zona de enraizamiento carezca de capas ocasionadas por cambios de textura o acumulación de thatch. La excepción a esto sería cuando la meta sea efectuar un cambio consciente del material de topdressing para mejorar las condiciones del suelo.
El objetivo de un programa de Topdressing es hacer aplicaciones livianas de arena a intervalos frecuentes para evitar el desarrollo de capas, ya sean de arena o de thatch.
El material para el Topdressing puede ser arena sola o una mezcla con alto contenido de arena, incluyendo arena turba, arena tierra o arena tierra turba, si bien la clave es el alto contenido de arena. La arena en correctas proporciones en el suelo otorga las ventajas de buen drenaje y aireación, como también un buen grado de resistencia a la compactación.
En canchas con mucho tráfico, son indispensables los greens con una elevada proporción de arena. Dado que la mayoría de las canchas no pueden afrontar la reconstrucción de viejos greens debido al alto costo que ello implica, el Topdressing de arena se ha convertido en una buena alternativa.
LAS CONDICIONES QUE EXIGEN EL TOPDRESSING
Existen condiciones básicas que exigen a los encargados de cancha la aplicación de Topdressing con arena, estas pueden ser:
* Cuando el green presenta problemas de compactación de difícil manejo.
* Cuando se desea mejorar a largo plazo la zona superior del suelo del green.
* Cuando se quiere igualar el suelo de los green viejos con la mezcla de arena utilizada en la construcción de los nuevos.
Hay quien prefiere el uso de altos contenidos de arena en mezclas con tierra, debido a las mayores capacidades de retención de nutrientes y agua que puedan sostener, Estas mezclas también puede proveer un mejor ambiente para mantener niveles adecuados de microorganismos del suelo muy deseables.
Pero se entiende que existen múltiples dificultades para ubicar una fuente adecuada de tierra y es muy complicado lograr la misma mezcla de suelo cada vez que se realice el Topdressing.
HACIENDO TOPDRESSING EXITOSAMENTE
Existen tres requisitos básicos para un programa eficiente:
* Selección de arena de alta calidad.
* Aplicación en las cantidades óptimas.
* Frecuencias de aplicación apropiadas.
CONSIDERACIONES SOBRE LA CALIDAD DE LA ARENA
El trabajo de ubicar una fuente de arena recorre la gama desde muy fácil e imposible. En algunas partes del país se encuentran arenas de alta calidad fácilmente disponible, mientras que en otros lugares sencillamente no se las encuentra, por lo que deberían usarse otras opciones para cumplir con los mismos objetivos.
La mayoría de los agrónomos coinciden en que el porcentaje de arena más gruesa que 0,75 mm debe ser mínimo, porque los granos de esa medida o mayores no se meten bien en el césped y pueden afectar la calidad de putting y, además, desafilar las cuchillas de las cortadoras.
En lo que no se está tan de acuerdo es sobre cuánta arena fina es aceptable en una arena para Topdressing.
Hay quien prefiere cantidades menores de arena fina mientras que otros aceptarían hasta un 50% en esta gama (ver cuadro).
En zonas con mayores lluvias y condiciones húmedas durante las épocas de mayor tráfico, es posible que sea necesario utilizar arenas más gruesas para un mejor drenaje, por otro lado, en zonas muy secas, un porcentaje mayo de arena fina puede ser aceptable para obtener mayo retención de agua.
Idealmente, una arena debiera tener entre 80 y 95% en la gama de 0,15-0,75 mm, con cantidades muy pequeñas fuera de esta gama.
Cuanto menor sea la gama del tamaño de los granos, tanto menor será la susceptibilidad a la compactación.
Otros aspectos que deben vigilarse cuando se compra arena para Topdressing son:
* Disponibilidad de entrega a largo plazo por parte del proveedor.
* Forma de las partículas.
* PH.
* Presencia de carbonatos libres.
* Mineralogía.
* Costo.
* Presencia de sales solubles o de otros elementos químicos indeseables.
Las arenas con alto contenido de silicio son las mejores, dado que son resistentes y duras a los efectos del tráfico.
Si es posible se debe evitar el uso de arenas que contienen una apreciable cantidad de minerales con base de piedra caliza. De tener que utilizarlas, no debe implementarse un programa de acidificación del suelo, dado que tal medida podría finalmente resultar en la reducción del tamaño de las partículas y pérdida de los macroporos. Asegúrese que la empresa que vende la arena pueda proveer el mismo tamaño y calidad durante varios años.
CANTIDAD DE ARENA A APLICAR
La cantidad y frecuencia del topdressing deben ajustarse a las condiciones específicas que existen en el green.
La orientación original propuesta por Madison y Davis era de 0,6 a 1 m³/1000 m², a ser aplicados cada tres o cuatro semanas. A proporciones tan bajas, la arena debiera caer dentro del thatch, sin molestar a los jugadores y con poco impacto en las cortadoras.
Las aplicaciones bien calculadas pueden resultar en producir una capa uniforme de arena y thatch, lo que puede proveer un medio razonable para el desarrollo de las raíces.
FRECUENCIA DE APLICACIÓN
Determinar la frecuencia apropiada puede ser el aspecto más difícil cuando debe llevarse a cabo un programa de topdressing. Sin dudas, debe ajustarse a la proporción de acumulación de thatch que es de difícil medición.
Se puede estimar la proporción de acumulación de thatch sobre la base de la velocidad del crecimiento del pasto. Si bien éste sistema puede no ser muy preciso, es el mejor que podemos recomendar por el momento.
La frecuencia original sugerida por Madison y Davis era a intervalos de tres a cuatro semanas. Como norma general, esta es una buena guía.
Existen, no obstante, una serie de factores adicionales que pueden incidir en la velocidad de acumulación de thatch. Estos incluyen:
* Especies y cultivar de los pastos.
* Velocidad del crecimiento del pasto en respuesta a las variables de temperatura y clima.
* Altura de corte.
* Tráfico y desgaste.
* Suelo y condiciones ambientales específicas para un determinado green.
* Programa de fertilización.
* Efectos de enfermedades, insectos, nematodes o tratamiento químico sobre el crecimiento del pasto.
Una muy importante variable que debe tenerse en cuenta es la altura de corte. Con alturas mayores se incrementa la tendencia a formar thatch, lo que haría necesario mayor frecuencia de topdressing. Contrariamente, un green cortado a 2,5 mm probablemente no forme thatch a una velocidad muy rápida. Para greens cortados a esta altura, el topdressing debería aplicarse a proporciones más livianas (tal como 0,2m³/1000m³).
Bajo condiciones de crecimiento rápido la frecuencia del topdressing debería incrementarse a intervalos de dos semanas, tal como podría ser el caso hacia fines de primavera para pastos de temporada fresca o en el verano para pastos de temporada cálida. Con un crecimiento lento el intervalo puede ser de cuatro semanas o más.
Si el green está sufriendo por un intenso tráfico o por un ataque de plagas, es posible que resulte necesario suspender el topdressing momentáneamente o bien aumentar el intervalo una semana o dos.
Se dan casos en que el césped está tan débil que la mejor recomendación es olvidarse completamente del topdressing.
Deberá prestarse especial atención en la programación del topdressing para que no se desarrollen capas ni de arena ni de thatch.
Unos pocos alegan haber seguido un programa de topdressing pasado y de poca frecuencia, tales como primavera u otoño (o ambos) con éxito. Pero son más los casos donde han ocurrido efectos negativos de largo plazo ocasionados por las capas resultantes.
Las investigaciones conducidas en la Universidad Estatal de Michigan desde 1981 apoyan el beneficio de un topdressing liviano y frecuente. Observándose un desarrollo de capas de los lotes tratados con menor frecuencia.
CONSIDERACIONES ADICIONALES
¿Se puede frenar un programa de topdressing una vez comenzado?. Si la calidad de la superficie del green (buen rodamiento y capacidad de recibir un golpe bien ejecutado) es adecuada, y puede garantizarse a través de los años, se podría pensar en cortar el programa. Pero sin dudas ello ha de crear dificultades futuras.
¿Debería incluirse la turba en el topdressing de arena?. Par los nuevos greens establecidos en mezcla de arena-turba resulta mejor continuar utilizando la misma mezcla. Para los greens viejos, establecidos y creciendo en suelo de textura más fina, el uso de turba puede no ser tan importante. Si la arena es aplicada de manera tal que se mezcle uniformemente con el thatch, parecería que no habría necesidad de turba, pues el thatch, (tanto material viviente como muerto) proporciona materia orgánica. Sin embargo, si se está usando muy gruesa, puede resultar sensato incluir la turba, dado que la arena gruesa serán más susceptible al estrés hídrico y dry spots localizados (manchas secas localizadas).
Si se desarrollan capas en los greens, la mejor solución es airearlos. El suelo tiene textura más fina que el material del topdressing, se desecharán los tarugos. Si no hay una diferencia muy grande, se pueden dejar los tarugos en el green desintegrándolos con una cortadora helicoidal con sus cuchillas separadas. Luego se debe agregar arena en la cantidad adecuada para llenar los agujeros.
Es evidente que si el suelo del topdressing es más arenoso que el suelo del green, con el tiempo será necesario un cambio significativo en las prácticas de manejo. Por ejemplo, un suelo arenoso ha de necesitar riegos más frecuentes.
Aún no está claro cuál es la profundidad de acumulación de arena que se necesita antes de efectuar un cambio de manejo.
En la medida en que se va aprendiendo tanto con las investigaciones como con la práctica en el campo adquiriendo experiencia mediante la observación, lograremos una mejor comprensión de esta importante herramienta de trabajo.
Extractado por el Ing. Guillermo Busso de SAND TOPDRESSING (Raúl E. Rieke)
Michigan State Universidad – Golf Course Management (marzo 1991).